CUENTO DE AMOR

 

CUENTO DE AMOR

 

MI CUENTO DE AMOR CON HUMOR

 

 

 

ALBERTO ALONSO MANCHENO ROMERO

8vo.B

 

Número de palabras: 682

 

AÑO LECTIVO

2020-2021

 

 

 

 

 

 

ENSAYO

 

 

TITULO

 

INTRODUCCIÓN

 

DESARROLLO

 

CONCLUSIÓN

 

 

LINK-BIBLIOGRAFÍA

 

 

 

 

 

 

Mi cuento de amor con humor

Por Alberto Mancheno

 

INTRODUCCIÓN.- Hace ya mucho tiempo cuando yo era aún un niño pequeño, vivía muy cerca de mi casa una niña muy hermosa, blanca, ojos claros y pelo negro llamada Lina, que siempre pasaba por mi casa con su mamá. Ella me miraba y yo también la miraba; pero ni siquiera éramos amigos. Su papá y su mamá la cuidaban mucho y cuando ella salía siempre la acompañaban.

DESARROLLO Y ARGUMENTACIÓN.- Un día de mi cumpleaños 14, ella tenía 12, me llevé una gran sorpresa, ella entró a saludarme. Mi hermana Emma compañera de la escuela la había invitado, me entregó un presente y así nos hicimos amigos, hablamos de muchas cosas entre ellas de cómo nos iba en los estudios. Yo me sentí muy emocionado.

El tiempo pasó, yo cumplí 16  años y ella 14, yo 18 y ella 16, nuestra amistad continuaba, hasta que un día me di cuenta que no podía vivir sin Lina. Así cuando cumplí 19 años y ella 17 le declaré mi amor, primero le envié una carta porque me sentía nervioso y con temor de que en persona me rechazara, un no para mí sería muy triste. Pero ella no me contestó; luego le envié otra carta, y otra más y siempre el mismo resultado, no había respuesta. Me inquieté porque Lina seguía actuando normalmente como si no se había enterado de nada. ¿Qué había sucedido?, que el papá era quien recibía la correspondencia y simplemente no se las entregaba.

El padre no quería que su “nenita” como él la llamaba tuviera enamorado, y así, pasaba el tiempo y yo cada vez más enamorado, parece que ese impedimento me hacía encaprichar cada vez más. Sin embargo, cosas del destino, llegó el día en que por fin estuvimos frente a frente solos, y yo aunque temblaba por dentro, me decidí a declararle mi amor a Lina. La tomé de las manos  y le dije: “Lina tú siempre me has gustado, te admiro y respeto y es más te amo, quiero ser algo más que tu amigo”  , pero ella se escabulló de mis manos y me dijo: “no, no,  yo no quiero tener enamorado, no por favor” y salió corriendo. Yo me quedé helado, sorprendido y apenado, porque pensé que nuestra amistad de años, tan bonita, de pronto terminaría.

Pasaron los días y yo no me daba por vencido, volvimos a vernos y esta vez yo noté un brillo especial en sus ojos, por mi parte yo sentí mariposas en mi estómago y me dije: Pato o gallareta, hoy o nunca” y otra vez me lancé al ruedo, tenía que arriesgarlo todo y volví a proponerle que sea mi novia. Estuve de suerte porque aunque no me aceptó me dio esperanzas y me dijo : “Dame tiempo que aún no estoy preparada para tener novio”.

CONCLUSIÓN.- Me sentía feliz , de  ahí en adelante la iba a visitar todos los días, le llevaba flores, chocolates, peinetas, moños para su pelo lindo, un diario, una pluma, bueno, cualquier presente que le demostrara  mi amor, hasta que llegó el día que en lugar de que yo me declare, fue ella quien me declaró su amor y me dijo: “Si Mahoma no va a la montaña, la montaña va a Mahoma” y me besó la mejilla y salió corriendo, se sentía avergonzada por haber tomado la iniciativa, pero yo me sentía feliz  con su amor y así fuimos novios unos cuatro años. Los dos seguimos estudiando en la Universidad, ella Diseño de Interiores y yo Tecnología en Electrónica. Una vez graduados pedí su mano y luego nos casamos,

Hoy formamos una familia feliz, somos padres de dos niños maravillosos y buenos, nos amamos y siempre recordamos cuando nos conocimos y todo el camino que hemos recorrido juntos.

Así, el valor de la constancia es la prueba que nos conduce a alcanzar lo que nos proponemos, pese a las dificultades; hasta en el amor.

 

ANEXO.-

 

 

BIBLIOGRAFÍA

Talento en Letras. Ediciones Nacionales Unidas